Devocionales prestados

40 días de propósito

Miércoles, día 7

Katie Berglee

Cuando pienso en lo que Jesús dio para arriba para mí en la Cruz yo no puedo dejar de preguntarse en el contraste. ¿Qué estaría dispuesto a renunciar a alguien que me había agraviado?

Jesús se reunieron con un hombre prominente que tenía dedos la línea de la moralidad y las reglas religiosas bien durante años. Amigo de Jesús Mateo registra sus observaciones de la interacción en su evangelio, Mateo 19:16-30.

Jesús utilizan preguntas para comunicarse con este joven. Cuando Jesús aparece muchos de los 10 mandamientos el joven rico dijo que con éxito había obedecido a todas ellas. Es interesante notar que Jesús no lo corrigió. Los discípulos deben haber sido impresionados con pantalla espiritual del hombre, así. Opciones exteriores del joven rico de obediencia y adoración eran buenas.

Pero Jesús conoce nuestro corazón – mejor de lo que conocemos nosotros mismos.

Jesús dice, "Si usted fuera perfecto, ir, vender lo que posee y da a los pobres, y tendrás un tesoro en el cielo; y ven, Sígueme." Con esta segunda declaración, Jesús canales a la lealtad interna del hombre a las posesiones ante Dios.

El primer mandamiento, no tendrás otros dioses delante de mí, no estaba en lista del joven de éxitos. Jesús le dieron la oportunidad de realinear su adoración por atrapamiento de posesiones para servirle a él a pie. Pero el hombre no podía hacerlo.

Leemos que el rico joven se alejó triste. Me rompecabezas. ¿Lo que podría haber sido tan precioso que él no daría estar con Jesús? Después de todo, era renunciar a tantas cosas para Dios. ¿Por qué no este colmo de los colmos?

La pregunta es profunda cuando me puse en los zapatos del joven. Puedo pensar de algunos hábitos en mi vida donde yo hago lo mismo. Estos hábitos, lealtades y opciones mantienen de Jesús. Como el joven rico también crezco triste cuando digo sí a ellos en lugar de Jesús. Pero yo estoy enredado con estos falsos dioses. Vivo para sus soluciones y su falsa protección. Una vez más me encuentro viviendo la "x" y decide evadir el trabajo o sacrificio que una vida vivida para la eternidad podría traer.

Tome un momento para considerar qué pregunta usted no quiere Jesús a preguntarle.
¿A qué temen que requerirá de usted?
Hable con Dios acerca de los hábitos, creencias y opciones que se mantienen de él.

©1994-2020 Cru. All Rights Reserved.