La Lectio Divina (en latín, "Lectura Divina") es una práctica antigua que nos invita a leer la Palabra de Dios de manera meditativa y orante. Es una forma de dejar que Dios hable directamente a nuestro corazón a través de las Escrituras. Si estás listo para hacer tu primera Lectio Divina, aquí tienes los pasos clave para seguir:
Ejemplo de oración:
"Señor, abre mi corazón y mi mente para escuchar lo que tienes para mí hoy. Habla a mi vida y ayúdame a caminar más cerca de Ti."
Elige un pasaje de la Biblia, puede ser corto (por ejemplo, un salmo o un fragmento del Evangelio). Léelo lentamente y con atención. No te apresures; deja que cada palabra tenga peso.
Consejo: Lee el pasaje dos o tres veces para que puedas captar el mensaje y las palabras que más destacan.
Preguntas clave para reflexionar durante la lectura:
Ahora, reflexiona sobre el texto y cómo se conecta con tu vida. Tómate unos minutos para pensar en lo que Dios podría estar diciéndote a través de esas palabras que resonaron en tu corazón.
Preguntas para guiar la meditación:
Responde a lo que has leído y reflexionado a través de una oración personal. Esta es tu oportunidad de hablar directamente con Dios sobre lo que te ha mostrado en el pasaje.
Puedes alabar, agradecer, pedir perdón o pedir ayuda. Sé honesto y abierto en tu conversación con Él.
En este último paso, simplemente quédate en silencio y permite que la presencia de Dios llene tu corazón. No es un momento para pensar, sino para estar con Él.
Consejo: Si tu mente comienza a divagar, vuelve a una palabra o frase del pasaje para centrarte.
Después de completar la Lectio Divina, piensa en una acción concreta que puedas llevar a cabo durante el día para poner en práctica lo que Dios te mostró.
Ejemplo: Si leíste un pasaje sobre el perdón, podrías decidir acercarte a alguien con quien necesitas reconciliarte.
Si no estás seguro por dónde empezar, aquí hay un pasaje sencillo pero profundo:
Salmo 23:1-3
"El Señor es mi pastor, nada me falta. En verdes pastos me hace descansar, junto a tranquilas aguas me conduce; me infunde nuevas fuerzas."
Léelo lentamente, reflexiona y deja que Dios hable a tu corazón a través de estas palabras de consuelo y cuidado.
Consejos Finales:
La Lectio Divina es un hermoso camino para fortalecer tu relación con Dios y permitir que Su Palabra transforme tu vida. ¡Anímate a intentarlo hoy mismo!
Si deseas ser guiado y aprender más sobre cómo practicar la Lectio Divina, estamos aquí para ayudarte. Haz clic en el botón amarillo en pantalla y alguien de nuestro equipo estará encantado de acompañarte y enseñarte a profundizar en esta práctica. ¡No estás solo en este camino espiritual!
©2025 Cru. todos los derechos reservados.