Vida y relaciones

Cómo cultivar amistades que duran toda la vida

Jason Weimer November 16, 2016

Con un ángulo de 45 grados y cubierto de barro y grasa, el "Slip Wall" en la serie de carreras de aventura "Spartan Ultimate Team Challenge" presentó a los competidores un obstáculo que nadie podía conquistar solo.

Los equipos lo atacaron apilándose en una escalera humana inestable, alzando a sus compañeros de equipo al ápice, todo mientras se preparaban contra la amenaza del colapso.

La vida a veces puede sentirse así. Todos enfrentamos obstáculos aparentemente insuperables (problemas financieros, crisis de salud, relaciones fracturadas), la lista podría continuar. Sin el apoyo de amigos cercanos y comprometidos, nunca superaremos estos muros.

El problema con los hombres y amistades significativas

Hace unos años, un artículo en Men’s Journal presentó el "Modelo de Déficit Masculino". Basado en 30 años de investigación, demostró que las amistades masculinas generalmente se dividen en tres categorías: conveniencia, tutoría y actividad. El artículo argumentaba que los hombres tienden a separarse una vez que terminan estas actividades compartidas.

A lo largo de mi vida, los amigos han ido y venido como una serie de TV en streaming, presente y agradable durante una temporada, y luego en gran parte olvidada.

Sin embargo, tuve la suerte de mantener varias amistades. Un grupo de otros siete hombres con los que he estado estrechamente conectado durante 20 años ofrece una plantilla útil para construir amistades duraderas.

1. Encuentra tu tripulación

La mayoría de mis amistades universitarias se centraron en jugar y ver deportes y participar en el capítulo de Cru de nuestra universidad. Estas experiencias nos dieron el vínculo de lado a lado que los psicólogos han encontrado que es la forma más común en que los hombres se conectan.

¿Dónde podrías encontrar a tu tripulación?

Hay muchos entornos disponibles para hombres de cualquier edad. Por ejemplo:

  • Deportes recreativos o de fantasía.
  • Iglesia pequeños grupos.
  • Clubes basados ​​en pasatiempos específicos.
  • Activismo comunitario.
  • Lugares de trabajo u organizaciones profesionales.

2. Quítate la máscara

Durante nuestro último año, un miembro del personal de Cru que fue nuestro mentor organizó un campamento en las montañas de Pensilvania. El viaje estuvo lleno de actividades divertidas, pero nuestro mentor también nos animó a abrirnos el uno al otro sobre las cosas más profundas de la vida: luchas, sueños, miedos, traumas.

Nos retó a quitarnos nuestras máscaras.

Los hombres normalmente se estremecen ante este tipo de vulnerabilidad, pero actúa como superpegamento, uniéndonos entre nosotros de maneras poderosas.

La profundidad de nuestra vulnerabilidad fue posible en gran parte por nuestra fe compartida en Jesús. Un versículo en la Biblia, Romanos 8: 1, dice que "ahora no hay condenación para los que están en Cristo Jesús" (Nueva Versión Internacional).

Todos llevamos cosas pesadas en nuestros corazones: cosas que hemos hecho o dicho o cosas que hemos hecho y dicho. Romanos 8: 1 explica que cuando llegamos a creer y seguir a Jesús, Él se ocupa de todo de lo que somos culpables y avergonzados. Ese fue el propósito de la muerte y resurrección de Jesús: que Él pudiera soportar nuestra culpa y el castigo que justamente merece, y luego dejarlo enterrado y desaparecer mientras nos invita a compartir una vida nueva.

En otras palabras, estamos sin condena. Esa verdad me libera para hablar sobre las partes más crudas de mí mismo con el conocimiento de que soy aceptado y amado. Cuando me abro de esa manera con hombres que comparten la misma fe, actúan como conductos de la aceptación de Cristo.

3. Pon una estaca en el suelo

Después de nuestro fin de semana en las montañas, mis amigos y yo firmamos un documento comprometiéndonos a estar conectados de por vida. Nos comprometimos a continuar construyendo nuestras amistades, alentar la fe de los demás y reunirnos una vez al año para encender las llamas de nuestra hermandad.

Este simple acto, hacer un compromiso solemne, es quizás el ingrediente más poderoso para mantener amistades de por vida.

Los 20 años que siguieron a nuestro compromiso nos han visto a cada uno de nosotros enfrentar enormes muros deslizantes. Un compromiso roto. Un niño muerto. Varios abortos espontáneos. Muertes de padres.

Sin poner una apuesta en el suelo antes del final de la universidad, habríamos tenido más probabilidades de enfrentar estos desafíos solos. Pero nuestro compromiso compartido con el grupo nos motivó a conectarnos en persona todos los años, a utilizar la tecnología para mantenernos cerca a pesar de la distancia física y a soportar las pesadas cargas que enfrentamos.

Vivir 

  • Conecte a un Ministerio de Cru para encontrar su equipo.
  • Considere cómo puede quitarse su máscara.

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